Eliminación de una
parte de la empresa
Este tipo de
decisiones son las que evalúan la conveniencia de eliminar productos, o dejar
de trabajar para un cliente o grupo de clientes, o eliminar una zona de ventas
o una fábrica, por ejemplo.
En estos casos, se
supone que una parte de los ingresos desaparecerían, pero de todas maneras hay
que estudiar los efectos producidos en otras partes de la empresa. Por ejemplo,
al eliminar un producto pueden producirse modificaciones en las ventas de otros
productos, que en algunos casos pueden verse beneficiados por esa decisión y en
otros casos salir perjudicados.
Los costes relevantes
son los que desaparecerían si se opta por la eliminación.
En principio, los
costes que desaparecerían son los costes variables, pero a veces puede desaparecer
algún coste que hasta ese momento era fijo. Por ejemplo, si se elimina un
producto no sólo desaparecen los costes de materia prima, ya que la empresa
también podría ahorrarse el sueldo del jefe de producto, que a pesar de ser
fijo hasta ahora, también podría desaparecer, si la empresa se plantea
despedirlo.
Todo ello, ha de
plasmarse en dos cuentas de resultados globales de la empresa, una incluyendo
la parte que se está evaluando, y la otra no ha de incluir dicho elemento para
poner de manifiesto las diferencias entre ambas.
Ejemplo: A continuación se
muestra la cuenta de resultados global de una empresa que se plantea la eliminación
de un producto. Se compara el resultado con y sin el producto en cuestión:
Con el producto X
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Sin el producto X
|
|
Ventas
|
1,450
|
1,200
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– Costes
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–950
|
–600
|
Resultado
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500
|
600
|
En base a los datos
anteriores, parece que es razonable la decisión de eliminar el producto X.
Además de las cifras hay que considerar elementos de tipo estratégico, como la
repercusión en la imagen de la empresa. Aunque desde el punto de vista del
beneficio, la decisión de eliminar el segmento en cuestión puede ser favorable.